domingo, 15 de mayo de 2011

Darkness, Capitulo 4


Capitulo 4: El encuentro

Magnus se miró al espejo, no sabía que ponerse. Esta noche saldría de nuevo con Jared.

Suspiró. Tenía que verse extraordinario.

Se dirigió a su armario, miró toda la serie de camisas que tenía, su mirada se dirigió inmediatamente a la camisa negra con decenas de hebillas de metal. Era la misma que había utilizado el día que había conocido a Alec.

El día en que había visto por primera vez esos hermosos ojos azules brillantes.

-No Magnus. Ahora no piense en él, ya basta.- se dijo en vos alta y aparto la mirada de la camisa.

Miro el resto de su armario, la mayoría de las cosas que tenía eran negras. Había cambiado su estilo de vestir desde que había llegado a Londres.

Pero hoy tenia ganas de ponerse algo distinto, era extraño se sentía enormemente ansioso como si hoy fuera a ocurrir algo muy especial.

Recorrió de nuevo su armario con la mirada, y la encontró. Ahí estaba escondida en el fondo de su armario, su fantástica camisa de seda color morado oscuro. La tomó y se la puso, junto con sus nuevos pantalones de cuero negro.

Se miró de nuevo al espejo.

-Excelente- dijo en voz alta

Y obtuvo un ronroneo de respuesta. Inmediatamente se giro hacia donde provenía el sonido.
Presidente Miau le miraba desde la entrada de su habitación, estaba inquieto.

-¿Qué te sucede amigo? Sientes lo mismo que yo.- le dijo a su gato

El gato maulló, se veía mas contento de lo normal.

-Algo extraño esta pasando, y no me quieres decir ¿Verdad?- dijo el Mago

El gato se le acerco, hasta los pies descalzos de Magnus, restregó su oscuro pelaje en las piernas del mago.

-Con que es eso, bola de pelos- dijo  con una sonrisa, mientras se ponía de cuclillas para alzar a su gato.

-Sabes, Presidente Miau. Es agradable tener un amigo con quien hablar, aun que muchas veces no estemos de acuerdo- dijo el Mago mientras acaricia al gato.

Se dirigió a su cama y deposito a su mascota en la misma mitras el buscaba sus zapatos de punta morados.

Estaban en la parte baja de su closet, los tomó y se dirigió a la cama. Presidente Miau aún estaba allí, mirándolo con curiosidad.

Se sentó al lado del gato mientras se calzaba los zapatos.

-¿Qué me vez?- dijo el mago a la defensiva.

El gato le miro de forma alegre. Seguramente su gato estaba feliz por que hacia mucho tiempo que no veía a su amo feliz.

Sonrió, y acarició cariñosamente al animal. Se levantó de la cama y se dirigió a su tocador, el cual se encontraba  muy limpio.

Desde que estaba en Londres no se había vuelto a maquillar. Pero ahora lo volvería a hacer, tomó un poquito de escarcha de un frasco y se la coloco con cuidado sobre sus parpados.

Se miro en el espejo de nuevo, ya casi estaba listo. Esperaba que Jared no tardase mucho en llegar.

-¿Cómo me veo amigo?- dijo al gato

Este lo miro de forma significativa de arriba a bajo y maulló dando su aprobación.

Sonrió, y tomo la gabardina morada que estaba en la silla del tocador. Y de manera muy coqueta se la puso.

-Ahora solo falta que llegue Jared- le dijo al gato.

En ese momento el gato le dio una mirada de rencor y se levanto de la cama donde ya se había acurrucado
.
Magnus lo miro incrédulo.

-No habrás pensado que iba a salir con Alec- le dijo al gato

Y pareció que el animal ignoro totalmente las palabras de su amo, por que salio de la habitación sin ni siquiera mirarle
.
- Ve acá, bola de pelos traidora- dijo Magnus

Y en el momento que iba a seguir a su gato, para dejarle muy en claro las cosas. En la puerta de entrada sonó con un golpe seco.

"¡OMG! Esa tiene que ser Jared" pensó mientras  se miraba de nuevo al espejo.

-Ni creas que esta conversación termina Presidente Miau- dijo Magnus mientras salía de su habitación.

El gato esta echado de forma aburrida en el sofá y miro a su amo de forma significativa. Como si él fuera el traidor.

No se detuvo a hablar con su mascota, no quería hacer esperar a Jared. Llegó a la puerta, tomó aire profundamente y lo dejo escapar mientras abría la puerta.

Una hermosa rosa negra lo recibió, su corazón latió muy deprisa. No podía creerlo.

Poco a poco alzo la mirada para ver a su portador, sintió como sus pulmones iban perdiendo aire.

 "No puede ser el,Dios no puede ser él" pensaba con una mezcla de suplica, alegría y enojo.

Pero los ojos que le devolvían la mirada no eran los de Alec, era mas oscuros, unos ojos azul eléctrico.

Sonrió, intentando no sentirse tan desilusionado.

Jared lo miraba de forma curiosa.

No sabia por que había creído que se tratada de Alec.

-Hola. Esto es para ti- le dijo Jared entregándole la rosa

-Hola. Y gracias por la rosa- dijo Magnus mientras la tomaba.

En ese momento fue cociente de que Jared, estaba relámete guapo. Con su camisa negra que remarcaba todos los músculos de su piel, sus pantalones negros, sus botas de combate y su cabello revuelo como si acabara de salir de la ducha.

-Nos vamos- dijo Jared con una picara sonrisa.

- ¿Cuál es el plan de hoy?- dijo Magnus mientras depositaba con ternura la rosa en la mesita cerca de la puerta.

-Vamos a comer algo y después podemos ver que más sucede, no garantizo donde terminemos- dijo Jared con una enorme sonrisa.

Le encantaba verlo sonreír

- Me encanta que escondas la palabra cama tan sutilmente- dijo Magnus con una sonrisa picara mientras cerraba la puerta tras él.

Jared río. Mientras se sonroja violentamente. 
                              
-No he dicho nada sutilmente- dijo con una sonrisa

-Pues eso pareció- dijo mientras se acercaba de forma sutil al vampiro.

Hoy se había propuesto algo y lo iba a conseguir. Pero primero jugaría con el vampiro, haber hasta que momento aguantaba.

Lo miró de forma picara

-Em, Magnus me estas poniendo nervioso.- dijo el vampiro mientras le miraba.

-¿Te pongo nervioso?- dijo Magnus cuando estaba pegado al cuerpo del vampiro.

-Si y mucho. Así que mejor…

Pero Magnus no lo dejo continuar por que en ese momento le dio un pequeño beso en el cuello.

Inmediatamente vio como el vampiro se tensaba por completo. Su plan estaba funcionando.

Ahora es tu turno de alcanzarme- le dijo al vampiro en un susurro- pero no se vale usar la súper velocidad.

Se aparto un poco y vio como los ojos del vampiro ardían.

-Anda, te daré una ventaja. Pero no respondo de lo que pueda pasar cuando te encuentre- dijo Jared.

Magnus sonrió a manera de respuesta. Acto seguido bordeó al vampiro y salio corriendo hacia la carretera principal.

No iba a dejar que el vampiro lo encontrara tan fácilmente, así que alzo un hechizo sobre él para que Jared no pudiera localizarlo.

Vio al vampiro pasar en la multitud de personas cercanas a él. Pero siguió adelante, no lo había visto.

Con una sonrisa corrió hacia el lado contrario de donde se dirigía Jared.

Hoy iba a ser una gran noche. Suspiró, alegremente.

En ese momento sin previo aviso choco contra una persona de forma violenta y perdió el equilibro cayendo sobre esta.

Magnus cerró los ojos, no odia creer que fuera tan estupido. Por andar pensando en otras cosas no se había fijado por donde caminaba.

-Perdón- dijo con un hilo de voz

Pero nadie le respondió, por su contextura sabia que quien estaba debajo de él era un hombre. Seguramente estaba furioso.

-Perdón, no escucho- dijo Magnus mientras poco a poco abría sus ojos para enfrentarse a él.

Pero vio algo que no esperaba, su corazón empezó a latir violentamente.

Vio su reflejo en unos hermosos ojos color azul pálido, esos ojos tan familiares del hombre que amaba.

"No Dios, que no sea otro sueño" suplicó.

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Alec sintió como una persona chocaba contra él violentamente y caía sobre él.

No estaba de ánimos para tener que lidiar con un despistado.

-Perdón- dijo el chico

Alec sintió como todo su cuerpo se tensaba, sintió su corazón latir de nuevo; era su voz. No fue capaz de responder nada, poco  a poco miró a la persona que estaba sobre él.

Era su mago, tenía sus ojos cerrados fuertemente. Seguramente en este momento se estaba muriendo de pena. Alec lucho con las ganas de abrazarlo.

- Perdón, no escucho- dijo mientras abría sus ojos.

Alec vio esos familiares ojos verdes, esos ojos de gato con lo que había soñado tanto. Esos extraordinarios ojos que amaba.

-Alec- dijo Magnus con un hilo de voz

Alec sonrió, le gustaba como sonaba su nombre en sus labios.

-Magnus- dijo Alec y vio como los ojos del mago lo miraban llenos de amor.

Por un segundo estuvo seguro de que Magnus aun lo amaba.

En ese momento sintió como el Mago se levantaba agresivamente .

-¿Qué haces aquí?- dijo el mago hecho una  furia.

-¡MAGNUS!!-grito Izzie

Magnus se volvió hacia la chica. Alec no podía dejar de mirarlo, estaba muy cambiado pero extraordinariamente bello como siempre.

El mago le dio una sonrisa a la chica y la abrazo.

-Deberías levantarte-  dijo Jace de forma que solo Alec pudiera escucharlo.

Rápidamente se puso en pie.

-Hola Magnus- dijo Clary

-Hola, a que debo su grandiosa visita- dijo Magnus mirando a Alec.

-Es que venimos por un asunto del instituto- dijo Alec

Vio como en los ojos del mago se reflejaba la desilusión, y sintió como su corazón se oprimía.

También miro a Izzie que lo miraba perpleja.

-Ah. Es por eso. Entonces no les quito más su valioso tiempo cazadores. Estoy en medio de una cita.- dijo mientras se volvía

Pero en es momento Alec lo sostuvo fuertemente por el brazo.

-¿Cómo que una cita?- dijo cortante

-¿Estas celoso?- dijo Magnus en forma irónica, mientras sus ojos brillaban.

-Si lo estoy.- Contesto

-Bueno, eso deberías de haberlo pensado antes de dejarme- dijo Magnus cortante, mientras lo miraba con sus ojos llenos de dolor.

Alec sintió como su corazón se oprimía aun más. Él era el único causante de ese dolor.

-Lo sé, tenemos que hablar- dijo Alec

-Y que sucede si yo no quiero hablar. Quizás ya es muy tarde Alexander.- dijo  Magnus, pero sus ojos decían lo contrario, aún no era tarde.

Alec no supo que decir.

-Ahora suéltame- dijo el mago enojado.

-No estas escuchando que lo sueltes- dijo una voz muy grave de atrás del mago.

Pero alec no lo soltó.

-¿Quién eres tú? – pregunto mientras se acercaba más a Magnus
.
-Soy su cita- dijo el hombre entrando en su visión.

Era un hombre un poco más alto que Alec, de ojos azules, cabello negro mucho mas corto que alec y piel muy pálida. Alec se dio cuenta que no era un hombre era un vampiro, un vampiro que le resultaba confusamente familiar.

Rápidamente repasaron por su mete las tres maneras mas eficaces de matara a un vampiro. Pero una fuerte presión en su hombro lo hizo salir de su ensoñación, Jace le estaba dando una señal, era hora de que soltara al mago. Pero el no quería hacerlo, sentía que si lo soltaba se lo estaba entregando a ese vampiro.

-Alec- dijo Jace en tono amenazante.

Alec agrupo todas las fuerzas que tenía para soltarlo.

Miró a Magnus, quien le devolvía la mirada fijamente. Poco a poco Alec lo soltó, pero no dejo de mirarle.

Te amo, le dijo Alec con sus labios sin necesidad de emir sonido.

Alec supo que el mago lo había entendido, por que en ese momento sus  cara adquirió un leve color rojizo.

Alec sonrió satisfecho. Miró al vampiro.

 Sin decir ni una sola palabra sabía que el vampiro estaba relámete enojado.

-No nos vas a presentar al vampiro- dijo Alec arqueando una ceja con arrogancia.

-¡Oh!- dijo Magnus- cierto. Él es Jared. Un amigo vampiro, con el que quede de solo esta noche.
La última frase la dijo mirando a Alec.

El vampiro parecía atónito. Alec sonrió una vez más.

-Mucho gusto- dijo Izzie

-Ellos son unos amigos cazadores de las sombras- dijo Magnus mirando por un segundo al vampiro- ella es Izzie, él es Simón, ella es Clary, él es Jace y- dijo con una voz cargada de sentimientos- él es Alec

-Lo supuse- dijo el vampiro con tono amargo- un gusto conocerlos.

-Bueno, nosotros nos vamos.- dijo Magnus tomando de la mano al vampiro.

Un ola de celos entro en su pecho.

-Espera- dijo Alec casi en un susurro.

Pero ya magnus se estaba alejando con el vampiro a su lado, como si fueran una pareja.

Alec sintió como la ira subía por su cuerpo, no iba a dejar las cosas así, Magnus todavía lo amaba y tendría que escucharlo. Tenia que seguirlos.

Pero antes de que dieran el primer paso Jace habló.

-Ese vampiro no me gusta- dijo Jace

Alec se volvió sorprendido.

-¿En serio?- dijo sarcásticamente.

-Si, no me gusta. Pero no por la misma razón que a ti no te gusta- dijo Jace muy serio.

Cosa que alarmo a Alec, esto era grave.

-¿Qué pasa con el vampiro?- dijo Simón

-Creo que todos estuvieron muy al pendiente del romántico encuentro de película y no se fijaron que el vampiro tenia una mancha de sangre es su pantalón. Y que además tenía una runa en la parte interior de su brazo, solo que no la pude identificar, no se cual es.- dijo Jace

-¿Estas seguro?- preguntó Clary

-Muy seguro- contestó Jace

Un frió recorrió el cuerpo de Alec, había dejado a Magnus marcharse con un asesino.

Sin pensarlo dos veces salió corriendo hacia el lugar donde había desaparecido su mago.


Autora: Gabriela León R.

Nota: Esta historia es basada en los libros de Cassandra Clare.

Los personajes Magnus Bane, Alec LightwoodMaryseLightwood, Clary Fray, Jace Herondale, Simon Lewis e Isabelle  Lightwood pertenecen a Cassandra Clare.
La portada de Darkness fue creada por Viviana Araya.

1 comentario:

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